por Fernando Berdugo
La ex mina Los Gigantes es un gran ejemplo de lo que hace la
minería a cielo abierto, aún teniendo actualmente una Ley Provincial que la
prohíbe. Es casi imposible que esta mina se pueda remediar. Pasaron 20 años
desde su cierre y sigue ahí, a cielo abierto, contaminando el cauce del rio San
Antonio y el lago San Roque.
Una pileta de decantacion (la mas chica, a la izquierda) y
el dique de colas (se los detallo para que vean como está).
Se encuentra en la provincia de Córdoba, en la Sierra Grande (sobre
le cerro que le da nombre) a 30
km de la ciudad de Villa Carlos Paz.
Dejó una cantidad de residuos radiactivos y peligrosos
(sustancias químicas) depositados en el predio sin la debida gestión de
remediación ambiental: 2.400.000 tn. de colas de uranio, 1.000.000 tn. de estériles
y 600.000 tn. de mineral marginal.
Funcionó desde el año1983 a 1989. En 1986 se comprobó que realizó descargas clandestinas de soluciones de ácido sulfúrico utilizado en la
lixiviación del Uranio.
Funcionó desde el año
Ediles de Villa Carlos Paz
aprobaron un proyecto para solicitar a la Comisión Nacional
de Energía Atómica (CNEA) que materialice las tareas de remediación ambiental
que, hasta ahora, JAMÁS REALIZÓ.
En 1986 se percibe la contaminación del cauce del Río San
Antonio, cuyas aguas presentan coloraciones verdosas y azuladas, producto de
volcamientos. En los Gigantes llueve entre 1000 y 1100 milímetros
anuales, lo que permite sostener que las crecidas derraman sustancias tóxicas
al río hasta el día de hoy. Esta contaminación produce alteración de la flora,
la mortandad de los peces y el impresionante espectáculo de las pezuñas de las
vacas totalmente carcomidas por estar en continuo contacto con las aguas
contaminadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario